56 millones de niños podrían morir hasta 2030 por hambre y otras causas evitables.
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| Casi 30 años después de la entrada en vigencia de la Convención sobre los Derechos del Niño, muchos infantes siguen estando desprotegidos. 56 millones podrían morir hasta 2030 por hambre y otras causas evitables. / Fuente: DW |
La falta de comida, de seguro médico, conflictos. Estas son razones por las que 56 millones de niños podrían morir hasta 2030. El pronóstico fue comunicado por el Gobierno Federal de Alemania en respuesta a un referéndum parlamentario de la bancada del partido Los Verdes. Este último estaba interesado en el progreso en la aplicación de la Convención de 1989 sobre los Derechos del Niño.
En total, 150 millones de niños en el mundo sufren de desnutrición crónica y 50 millones más severamente. El destino de menores en áreas de conflicto armado también es motivo de preocupación, según el Gobierno Federal. Los bebés están más que nunca "desprotegidos ante la violencia generalizada y las violaciones sistemáticas del Derecho Internacional Humanitario". Más de dos tercios de todos los niños del mundo están sujetos a algún tipo de violencia, de acuerdo con el documento. El Gobierno Federal se basa en datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, de la Organización Mundial para la Salud y del Programa Mundial de Alimentos.
La contaminación ambiental
Según el mismo informe, el cambio climático también representará una amenaza para los niños en el futuro. Se asegura que 500 millones de niños viven en regiones donde pueden ocurrir inundaciones, 115 millones en áreas frecuentemente afectadas por tormentas tropicales y 160 millones en áreas afectadas por la sequía. En total, una cuarta parte de las muertes de niños menores de cinco años se atribuye al cambio climático.
Alemania contribuyó en 2017 a 572 millones de euros para mejorar las condiciones de salud de los niños y las madres. Los beneficiarios de esta ayuda financiera fueron organizaciones bilaterales y multilaterales. El especialista en Derechos Humanos del partido alemán Los Verdes, Kai Gehring se congratula de que la mejora de las condiciones de vida de los niños es finalmente una prioridad en la agenda exterior del país. Sin embargo, asegura que todos estos esfuerzos pueden ser inútiles, siempre y cuando las armas sigan siendo exportadas. Según él, el gobierno alemán debería invertir mejor el astronómico y controvertido presupuesto para armas de guerra en ayuda humanitaria y en la creación de oportunidades para niños vulnerables.
La Convención sobre los Derechos del Niño fue aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989. Sus 54 artículos contienen un marco legal para garantizar el desarrollo físico, mental y social de los niños menores de 18 años en el contexto global. De manera igual, los Estados firmantes deben brindar oportunidades de educación, salud y supervivencia, así como mecanismos de inclusión y participación en la vida política y social.
